Músico y compositor británico conocido por ser el guitarrista y vocalista de la icónica banda de rock Pink Floyd. Con su estilo único y emotivo de tocar la guitarra, ha dejado una huella indeleble en la historia del rock. En esta biografía, exploraremos su vida y carrera musical.
David nació el 6 de marzo de 1946 en Cambridge, Inglaterra. Hijo de un profesor universitario, creció en una familia de clase media alta junto a su hermano menor, Peter.
Desde temprana edad, David mostró un gran interés en la música. A los 11 años, recibió su primera guitarra y comenzó a tomar clases de guitarra clásica. Fue en ese momento cuando descubrió su amor por la música y su deseo de convertirse en músico.
El contexto en el que creció fue muy importante para su formación como músico. Cambridge era una ciudad universitaria en constante ebullición cultural, y David estaba expuesto a una gran variedad de influencias musicales. Además, su padre era un gran amante de la música clásica y le proporcionó una educación musical temprana y rigurosa.
A los 13 años, comenzó a tocar la guitarra y a experimentar con diferentes estilos y técnicas, y su habilidad y estilo personal se fueron desarrollando a lo largo de los años a través de la práctica y la exploración. También comenzó a tocar en bandas locales y a escribir sus propias canciones.
Aunque la infancia de David fue relativamente feliz y sin problemas, su familia experimentó una gran tragedia cuando su padre se suicidó cuando David tenía 21 años. Esta pérdida tuvo un gran impacto en la vida y la música de David, y se convirtió en un tema recurrente en sus letras y su música.
Pasó gran parte de su adolescencia tocando la guitarra y formando bandas locales en su ciudad natal de Cambridge, Inglaterra. A los 14 años, dejó la escuela para dedicarse por completo a la música, lo que preocupó a su familia, quienes querían que continuara con sus estudios.
A pesar de las preocupaciones de su familia, estaba decidido a seguir su pasión por la música. Durante este tiempo, tocó en varias bandas locales, incluyendo Joker's Wild, que fue su primer proyecto musical serio. En esta banda, David comenzó a desarrollar su propio estilo de tocar la guitarra y a explorar diferentes géneros musicales, desde el blues hasta el rock psicodélico.
En 1967, David fue invitado a unirse a Pink Floyd como reemplazo del guitarrista Syd Barrett, quien estaba experimentando problemas mentales. Fue en en esta banda donde David realmente comenzó a destacar como músico y compositor, y se convirtió en uno de los pilares creativos de la banda.
Fuera de la música, David se casó con su primera esposa, Virginia Hasenbein, en 1975, con quien tuvo cuatro hijos. La pareja se divorció en 1994 y David se casó con la novelista Polly Samson en 1995, con quien también tuvo cuatro hijos.
David Gilmour se unió a Pink Floyd en un momento crítico en la historia de la banda. Después de la salida de Syd Barrett, la banda estaba buscando un nuevo sonido y dirección. David, quien ya había trabajado con los miembros de Pink Floyd anteriormente en la banda Jokers Wild, fue invitado a unirse a la banda como guitarrista y vocalista.
La primera gran contribución de David en la banda fue en el álbum "A Saucerful of Secrets", donde compuso y tocó la guitarra en la canción "Jugband Blues", una de las últimas composiciones de Syd Barrett para Pink Floyd. Con el tiempo, David se convirtió en el guitarrista principal de la banda y contribuyó de manera significativa en la composición y producción de los álbumes siguientes.
En el álbum "Meddle", David tuvo la oportunidad de mostrar todo su talento como guitarrista y compositor. En la épica canción "Echoes", la última pista del álbum, David crea una atmósfera envolvente con su guitarra, creando un paisaje sonoro emocionante y evocador. La canción es considerada por muchos fanáticos como una de las mejores de Pink Floyd, y el trabajo de David en la misma es una de las razones por las que "Meddle" se considera un álbum clave en la historia de la banda.
En la siguiente etapa, Pink Floyd comenzó a trabajar en un nuevo concepto de álbum conceptual con "The Dark Side of the Moon". En este álbum, no solo fue el guitarrista principal, sino que también contribuyó en gran medida a la creación de las melodías y arreglos de las canciones. De hecho, canciones como "Breathe", "Us and Them" y "Time" cuentan con solos de guitarra icónicos que se han convertido en algunos de los más reconocidos en la historia del rock.
Pero su contribución no se limitó solo a la guitarra. También tuvo un papel importante en la producción del álbum, en particular en la creación de los sonidos atmosféricos que definen gran parte del sonido distintivo de Pink Floyd. Por ejemplo, fue el responsable de crear los efectos de eco y reverberación en la introducción de "Time", lo que ayuda a crear un ambiente de misterio y suspenso que continúa durante todo el álbum.
Además, también tuvo un papel importante en la grabación de las voces en el álbum. Se dice que tuvo que trabajar duro para convencer a Roger Waters, el principal vocalista y letrista de la banda, de cantar en una de las canciones más icónicas del álbum, "Great Gig in the Sky". Y su influencia en la producción del álbum fue tan importante que incluso se dice que fue el responsable de que la canción "Money" terminara con el sonido de una caja registradora.
En "Wish You Were Here", David tuvo una participación magistral tanto en la composición como en la producción del álbum. Además de ser el guitarrista principal, también contribuyó en la creación de las melodías y letras de algunas de las canciones más icónicas del álbum.
Una de las anécdotas más interesantes sobre la grabación de este álbum es sobre la canción principal, "Shine On You Crazy Diamond". La canción es un homenaje a Syd Barrett, el miembro fundador de Pink Floyd que había abandonado la banda a mediados de los años 60 debido a problemas de salud mental.
David y los demás miembros de la banda habían perdido contacto con Syd, y cuando entró en el estudio un día durante la grabación de "Wish You Were Here", no lo reconocieron de inmediato debido a su apariencia irreconocible. Según la leyenda, Syd había afeitado todo su pelo y había engordado mucho desde la última vez que lo habían visto.
A pesar de esto, los miembros de la banda lo invitaron a quedarse y escuchar las nuevas canciones que estaban grabando, y se dice que Syd se emocionó al escuchar "Shine On You Crazy Diamond", que estaba dedicada a él.
David también contribuyó en la creación de otras canciones icónicas del álbum, como "Welcome to the Machine" y "Have a Cigar". Además de su trabajo en la guitarra, David también se encargó de producir el álbum, y fue uno de los responsables de la creación de los sonidos atmosféricos que definen el sonido distintivo de Pink Floyd.
La participación de David Gilmour en el álbum "Animals" es sin duda una de las más importantes de su carrera con Pink Floyd.
En este álbum, demostró una vez más su capacidad para crear solos de guitarra increíblemente poderosos y emocionales. En canciones como "Dogs" y "Pigs (Three Different Ones)", su técnica de guitarra se fusionó perfectamente con las letras del álbum para crear un sonido que se convirtió en la banda sonora de la disidencia política y la alienación social en la década de 1970.
Pero la influencia de David no se limitó solo a su técnica de guitarra. También contribuyó en gran medida a la producción del álbum, ayudando a crear el sonido distintivo de Pink Floyd que caracteriza a "Animals". Por ejemplo, en la canción "Dogs", el uso de sintetizadores y efectos de sonido contribuye a crear un ambiente oscuro y opresivo que complementa perfectamente las letras de la canción.
Además, su papel en la creación del álbum también se extendió a la grabación de voces. En "Pigs (Three Different Ones)", su voz de fondo en el coro eleva la canción a nuevas alturas emocionales y ayuda a crear una sensación de unión y solidaridad en la lucha contra la opresión.
Por último, pero no menos importante, David también fue clave en la creación de la portada del álbum, una representación gráfica del concepto de animales en la sociedad. Trabajando junto al artista gráfico Storm Thorgerson, la portada se convirtió en un icono de la cultura pop y una de las imágenes más reconocidas de la banda.
Después de la grabación de "Animals", continuó su exitosa carrera con la banda, participando en la grabación de "The Wall", un álbum doble que se convirtió en uno de los mayores éxitos comerciales de la banda. En este álbum, Gilmour contribuyó con algunas de las canciones más icónicas de la banda, incluyendo "Comfortably Numb" y "Another Brick in the Wall (Part II)", donde su estilo de guitarra emotivo y potente se destacó una vez más.
En 1984, lanzó su primer álbum en solitario, "David Gilmour", que fue muy bien recibido por los críticos y los fanáticos de la banda. En este álbum, exploró su lado más personal y emotivo, dejando atrás el sonido de Pink Floyd para crear un trabajo más introspectivo y reflexivo.
En la década de 1980, Pink Floyd se embarcó en una serie de proyectos paralelos y proyectos en solitario. Gilmour contribuyó con su guitarra y su voz en varios proyectos de Roger Waters, incluyendo "The Final Cut". También colaboró con otros músicos, como Pete Townshend y Bryan Ferry.
David asumió el control de Pink Floyd en 1985, después de la partida de Roger Waters, creando el nuevo álbum de Floyd, con Richard Wright y Nick Mason, "A Momentary Lapse of Reason", que marcó el regreso de Pink Floyd después de un período de inactividad. En este álbum, Gilmour asumió un papel más destacado como líder de la banda, escribiendo muchas de las canciones y produciendo el álbum. También se destacó en los solos de guitarra, incluyendo el icónico solo de "Comfortably Numb" durante la gira de promoción del álbum.
Fue seguido en 1994 por "The Division Bell", que contenía la instrumental "Marooned", compuesta por David y Richard Wright, por la cual Pink Floyd ganó su único Premio Grammy. Ambos álbumes alcanzaron el número 1 en ambos lados del Atlántico y fueron respaldados por giras mundiales con entradas agotadas. El álbum y el video en vivo, "P.U.L.S.E.", siguieron en 1995.
Desde entonces, David Gilmour ha continuado su carrera en solitario, lanzando varios álbumes y participando en proyectos paralelos. En 2014, la banda lanzó su último álbum, "The Endless River", que incluyó grabaciones inéditas de Richard Wright y destacó el legado duradero de la banda.
David es uno de los grandes guitarristas de todos los tiempos, con un sonido instintivo y distintivo; fue votado como el "Mejor guitarrista de Fender de todos los tiempos" en una encuesta en la revista Guitarist, superando a grandes como Jimi Hendrix y Eric Clapton.
En 2005, David fue nombrado CBE por sus servicios a la música. En julio de 2005, Pink Floyd se reunió con Roger Waters para una actuación única en Live 8 en Hyde Park de Londres, que fue considerada por muchos como lo más destacado de un espectáculo impresionante.
El álbum homónimo "David Gilmour" es el debut en solitario del legendario guitarrista y cantante de Pink Floyd, David Gilmour. Lanzado en 1978, este disco es una ventana al talento y la creatividad de uno de los músicos más influyentes y respetados en la historia del rock. Con un enfoque más personal e introspectivo que el de su trabajo en Pink Floyd, "David Gilmour" es un álbum que cautiva por su sencillez y por la profundidad emocional de sus canciones.
El álbum "David Gilmour" fue grabado en un momento en el que Pink Floyd estaba en pleno proceso de cambio y reinvención. Tras la salida del miembro fundador Roger Waters, Gilmour tomó las riendas de la banda y decidió explorar nuevos horizontes musicales en solitario. Este disco es el resultado de esa búsqueda personal y artística, en la que el músico se adentra en un territorio más íntimo y experimental.
A lo largo de las diez canciones que componen el álbum, David Gilmour nos sumerge en un universo de sonidos y emociones que reflejan su evolución como músico y como ser humano. Desde la apertura del disco con "Mihalis", una pieza instrumental en la que Gilmour demuestra su virtuosismo con la guitarra, hasta la emotiva "So Far Away", el álbum nos lleva de la mano por un viaje emocional lleno de matices y contrastes.
Uno de los aspectos más destacados de "David Gilmour" es la capacidad del músico para fusionar diferentes estilos y géneros en un todo coherente y armonioso. En canciones como "There's No Way Out of Here" y "Cry from the Street", Gilmour combina elementos del rock progresivo, el blues y el folk para crear un sonido único y personal. Además, su voz característica y su habilidad para transmitir emociones a través de la guitarra hacen que cada tema cobre vida y se conecte con el oyente de manera profunda e inmediata.
El álbum "David Gilmour" es también un testimonio de la evolución del músico como compositor y letrista. A lo largo del disco, Gilmour aborda temas como el amor, la soledad y la búsqueda de la identidad, con un enfoque lírico que es al mismo tiempo poético y directo. Esta honestidad emocional es uno de los factores que hace que el álbum sea tan atractivo y sugerente, ya que nos permite conectar con el artista en un nivel más personal e íntimo.
"About Face" es el segundo álbum en solitario del icónico guitarrista y cantante de Pink Floyd, David Gilmour. Lanzado en 1984, este trabajo es una muestra de la versatilidad y creatividad del músico británico, que se atreve a explorar nuevos territorios sonoros y temáticos, manteniendo la esencia de su estilo característico. Con un lenguaje claro y evocador, "About Face" se ha consolidado como una obra fundamental en la discografía de Gilmour y un referente en la historia del rock.
El álbum "About Face" fue concebido en un período de cambios y tensiones dentro de Pink Floyd, que se encontraba en plena transición tras la salida de Roger Waters. Este contexto de incertidumbre y búsqueda de nuevas direcciones se refleja en el sonido y la temática del disco, que muestra a un David Gilmour dispuesto a asumir riesgos y a experimentar con distintos géneros y estilos musicales.
En "About Face", Gilmour abandona parcialmente el enfoque introspectivo de su primer álbum en solitario y se sumerge en un universo sonoro más variado y enriquecedor. Canciones como "Until We Sleep" y "Blue Light" combinan elementos del rock, el pop y el funk, dando lugar a un sonido fresco y original. Por otro lado, temas como "Out of the Blue" y "Near the End" mantienen la esencia del rock progresivo que caracteriza a Pink Floyd, con emotivas letras y solos de guitarra que demuestran el talento indiscutible de Gilmour como músico y compositor.
El álbum también aborda temas políticos y sociales, como en "Murder", una canción que reflexiona sobre la violencia y la injusticia, y "Cruise", que critica la proliferación de armas nucleares. Estas temáticas, junto con la exploración de sentimientos personales y relaciones humanas, hacen que "About Face" sea un álbum sugerente y atractivo, que invita al oyente a reflexionar sobre el mundo que le rodea.
En términos de producción, "About Face" cuenta con la colaboración de Bob Ezrin, reconocido productor que trabajó con Pink Floyd en el álbum "The Wall". Su influencia es evidente en la pulcritud y coherencia sonora del disco, así como en la selección de músicos que acompañan a Gilmour en su aventura en solitario, entre los que se encuentran el bajista Pino Palladino y el baterista Jeff Porcaro.
"About Face" es un álbum que demuestra la madurez y el talento de David Gilmour como músico y compositor, y que se ha ganado un lugar destacado en la historia del rock. Con su riqueza sonora, sus letras evocadoras y su enfoque audaz y experimental, este disco es una muestra del potencial creativo de Gilmour y una obra que sigue siendo relevante y emocionante más de tres décadas después de su lanzamiento.
"On An Island" es el tercer álbum en solitario del legendario guitarrista y vocalista de Pink Floyd, David Gilmour. Publicado en 2006, este trabajo discográfico es una muestra de la evolución artística y la madurez del músico británico, que se adentra en territorios sonoros serenos y atmosféricos, explorando nuevos matices y texturas musicales. Con un lenguaje claro y evocador, "On An Island" se ha convertido en un referente en la carrera de Gilmour y en la historia del rock.
El álbum, que celebra el 60 cumpleaños de Gilmour, se caracteriza por su tono introspectivo y meditativo, reflejando la tranquilidad y el sosiego que el músico ha encontrado en su vida personal y profesional. Las canciones de "On An Island" abordan temáticas como el amor, la naturaleza y la conexión espiritual, invitando al oyente a sumergirse en un viaje emocional y sensorial a través de paisajes sonoros melódicos y envolventes.
En "On An Island", Gilmour se aleja del rock progresivo característico de Pink Floyd y se adentra en un estilo más suave y contemplativo, con influencias del folk, el blues y la música ambiental. Canciones como "The Blue" y "Red Sky at Night" son ejemplos de la riqueza y sutileza de la música del álbum, que se nutre de delicados arreglos de guitarra, teclados y vientos, creando un ambiente etéreo y evocador.
La producción del álbum estuvo a cargo del propio Gilmour, junto a Chris Thomas y Phil Manzanera, guitarrista de Roxy Music. Este equipo logró un sonido pulido y equilibrado, que realza la belleza de las composiciones y la emotividad de la voz de Gilmour. Además, "On An Island" cuenta con la colaboración de destacados músicos, como Richard Wright, tecladista de Pink Floyd, y David Crosby y Graham Nash, de Crosby, Stills & Nash, que aportan armonías vocales en la canción que da título al álbum.
Una de las particularidades de "On An Island" es la integración de instrumentos poco convencionales en el repertorio de Gilmour, como el saxofón, la armónica y el corno inglés, que aportan calidez y sofisticación a las composiciones. Además, el álbum destaca por su cohesión y unidad temática, que se refuerza con la inclusión de interludios instrumentales que sirven como enlace entre las distintas canciones.
"On An Island" es un álbum que refleja la madurez y la introspección de David Gilmour como músico y compositor, y que ha dejado una huella indeleble en la historia del rock. Con su lirismo poético, su atmósfera envolvente y su enfoque intimista y reflexivo, este trabajo discográfico es una invitación a explorar las profundidades emocionales y sensoriales de la música, y a conectar con la esencia de la vida y la naturaleza.
"Live in Gdansk" es un álbum en vivo del icónico guitarrista y vocalista de Pink Floyd, David Gilmour, lanzado en 2008. Este trabajo discográfico documenta el último concierto de la gira mundial "On An Island Tour", realizado en la ciudad polaca de Gdansk el 26 de agosto de 2006. Con un lenguaje sencillo y evocador, este álbum en vivo captura la esencia de la música de Gilmour y su habilidad para conectar con el público a través de su emotiva interpretación y su magistral dominio de la guitarra.
El concierto de Gdansk fue un evento único e histórico, no solo por su magnitud y su impacto cultural, sino también por la colaboración de la Orquesta Filarmónica de Gdansk, dirigida por Zbigniew Preisner, en algunas de las canciones. Esta unión entre el rock y la música clásica otorga una dimensión adicional a las interpretaciones de Gilmour, enriqueciendo su sonido y dotándolo de una profundidad y emotividad sin precedentes.
"Live in Gdansk" incluye una selección de temas de su álbum "On An Island", así como clásicos de Pink Floyd como "Shine On You Crazy Diamond", "Comfortably Numb" y "Wish You Were Here". La ejecución de estas emblemáticas canciones en vivo permite apreciar la maestría de Gilmour como guitarrista y la versatilidad de su estilo, que abarca desde el rock progresivo hasta el blues y la música ambiental.
Uno de los aspectos más destacados de "Live in Gdansk" es la calidad del sonido y la producción, que logra transmitir la energía y la emoción del concierto en vivo. El álbum, producido por Gilmour y Andy Jackson, presenta una mezcla equilibrada y nítida, que pone de manifiesto la destreza de los músicos y la química entre Gilmour y su banda.
Además, "Live in Gdansk" cuenta con la participación de músicos de renombre, como Richard Wright, tecladista de Pink Floyd, que falleció poco después del lanzamiento del álbum, y Guy Pratt, bajista que ha colaborado con Gilmour y Pink Floyd desde la década de 1980. Sus contribuciones realzan la calidad artística del álbum y refuerzan el legado de Pink Floyd en la historia del rock.
En resumen, "Live in Gdansk" es un testimonio de la maestría de David Gilmour como músico y compositor y de su capacidad para emocionar y cautivar a su audiencia. Este álbum en vivo, con su lenguaje sencillo y evocador, ofrece una experiencia inolvidable para los amantes de la música y consolida el lugar de Gilmour en el panteón de los grandes artistas de nuestro tiempo.
"Rattle That Lock" es el cuarto álbum en solitario del legendario guitarrista y vocalista de Pink Floyd, David Gilmour, lanzado en 2015. Este trabajo discográfico muestra la madurez y evolución artística de Gilmour, quien, a lo largo de su carrera, ha sabido combinar elementos del rock progresivo con la música ambiental y el blues. Con un lenguaje sencillo y evocador, "Rattle That Lock" brinda al oyente una experiencia auditiva rica en matices y emociones, que refleja la maestría del músico británico.
El álbum fue coescrito en gran parte por Gilmour y su esposa, la escritora y letrista Polly Samson, cuya influencia en las letras confiere una sensibilidad poética y una profundidad emocional a las canciones. En "Rattle That Lock", Gilmour explora temáticas diversas, como la libertad, la espiritualidad y el paso del tiempo, que se entrelazan a lo largo de las diez canciones del álbum.
Musicalmente, "Rattle That Lock" se caracteriza por la diversidad de estilos y sonoridades, que van desde el rock clásico hasta el jazz y la música electrónica. La habilidad de Gilmour para fusionar estos géneros de manera orgánica y coherente es evidente en canciones como la homónima "Rattle That Lock", que combina el blues con elementos de funk y gospel, y "A Boat Lies Waiting", una emotiva balada dedicada a su fallecido compañero de banda, Richard Wright.
Uno de los aspectos más destacados de "Rattle That Lock" es la maestría con la que Gilmour interpreta la guitarra, su instrumento icónico. A lo largo del álbum, el guitarrista despliega un amplio abanico de técnicas y sonidos, desde el característico "slide" hasta el "fingerpicking", demostrando su versatilidad y destreza como músico.
Además, en "Rattle That Lock", Gilmour se rodea de un grupo de músicos de primer nivel, como el bajista Guy Pratt y el tecladista Jon Carin, quienes aportan su talento y experiencia para enriquecer el sonido del álbum. La producción, a cargo de Gilmour y Phil Manzanera, exguitarrista de Roxy Music, es impecable y refleja la atención al detalle y la dedicación que el músico británico ha puesto en cada uno de sus proyectos.
En resumen, "Rattle That Lock" es una obra que refleja la evolución artística de David Gilmour y su capacidad para reinventarse y experimentar con nuevos estilos y sonoridades. Con un lenguaje sencillo y evocador, este álbum ofrece una experiencia musical única y emocionante, que cautiva tanto a los seguidores de Pink Floyd como a los amantes de la música en general.
"Live at Pompeii" es un álbum en vivo del icónico guitarrista y vocalista de Pink Floyd, David Gilmour, lanzado en 2017. Este trabajo discográfico, grabado en el histórico Anfiteatro Romano de Pompeya, Italia, es un ejemplo perfecto de cómo la música puede trascender el tiempo y el espacio, fusionando el pasado con el presente en un entorno evocador e inolvidable.
El concierto, que tuvo lugar en julio de 2016, marcó la primera vez que un artista se presentaba ante una audiencia en el antiguo anfiteatro desde la época de los gladiadores romanos. Gilmour eligió este escenario único no solo por su belleza arquitectónica e histórica, sino también por su conexión con Pink Floyd, que en 1971 filmó su emblemático concierto documental "Pink Floyd: Live at Pompeii" en el mismo lugar, pero sin público presente.
En "Live at Pompeii", Gilmour ofrece una selección cuidadosamente elegida de temas tanto de su carrera en solitario como de su etapa con Pink Floyd. El repertorio incluye clásicos como "Shine On You Crazy Diamond", "Wish You Were Here" y "Comfortably Numb", así como canciones de su álbum en solitario "Rattle That Lock" y otros trabajos. La interpretación de Gilmour y su banda en este escenario histórico es impecable, y la emotividad de las canciones se ve realzada por la atmósfera mágica y mística del lugar.
Uno de los aspectos más destacados del álbum es la habilidad de Gilmour para adaptar su estilo de guitarra a cada canción, mostrando su versatilidad y maestría como músico. Además, su voz sigue siendo inconfundible y conmovedora, especialmente en las baladas más emotivas. La banda que acompaña a Gilmour en este concierto está formada por músicos de primer nivel, como el bajista Guy Pratt, el tecladista Greg Phillinganes y el baterista Steve DiStanislao, quienes contribuyen a crear un sonido envolvente y poderoso.
El álbum también cuenta con una producción audiovisual excepcional, que captura de manera vívida la energía y la emoción del concierto. La dirección de fotografía, a cargo de Gavin Elder, utiliza planos y ángulos variados para mostrar tanto el impresionante escenario como las emociones de los músicos y el público.
En resumen, "Live at Pompeii" es un álbum en vivo que captura la esencia del arte de David Gilmour en un escenario único e histórico. Con un lenguaje sencillo y evocador, este trabajo discográfico ofrece una experiencia musical inolvidable y emotiva, que conecta a los oyentes con la rica historia de Pompeya y la majestuosidad del legado de Pink Floyd y David Gilmour.
Usamos cookies para analizar el tráfico del sitio web y optimizar tu experiencia en el sitio. Al aceptar nuestro uso de cookies, tus datos se agruparán con los datos de todos los demás usuarios.